Redundancia  colapso  y  nula  redundancia Oh! punto de escisión, margen  infinito... Singularidad  encriptada  al fatuo  olvido. Por tantos  y  tantos  crepúsculos  sucesivos encadenados  para siempre a  un  mismo  destino de redención  a  un  Dios  que vaga  en  curvaturas  de  universos  divergentes  y que busca  verse en el espejo  leitmotiv  de  lo  imperfecto. Mientras , sin concesiones,  inertes los  cuerpos  orbitan entre  ondas de luz en  profana sincronía. Fielmente el Todo encuentra  su contraparte  y  lo  absoluto  es referencia  de  la sutil  nada. Lo  imperativo cede  al curso de los  pragmático: verificando conceptos, incógnitas, certidumbre. Antes del  tacto, la cifra o  la  huella  primigenia  era la acción...